Viaje a Nueva Delhi, la capital de la India
Nueva Delhi, la capital de la India, es la ciudad más poblada del país y la quinta más poblada del mundo. La capital, desgraciadamente, también encabeza el primer puesto de las ciudades más contaminadas. Se calcula que la polución ocasiona 10 mil muertes prematuras al año y que incluso ha llegado a superar hasta veinte veces el nivel que la Organización Mundial de la Salud considera aceptable.
Aproveché mis vacaciones para volar a Nueva Delhi y viajar por la India durante 3 semanas. Si tenía un país pendiente después de 6 años en Asia este era India. Los países del sudeste asiático son todos magníficos pero tienen parecidos razonables y después de varios años en China necesitaba ver algo totalmente diferente. El país de los contrastes y los colores parecía el destino ideal.
Consejos Nueva Delhi: el aeropuerto de Nueva Delhi
¿Cómo ir del aeropuerto de Nueva Delhi al centro de la ciudad?
Viajé acompañado de dos amigos, un madrileño y un extremeño. Desde Kunming (Yunnan) a Nueve Delhi son solo 5 horas de vuelo por lo tanto nos pillaba bastante cerca. Solo llegar al aeropuerto de Nueva Delhi, una vez conseguimos rupias nos fuimos a la oficina de Prepaid Taxi. En esa oficina dices donde quieres ir y pagas el viaje con antelación.
Sales fuera del aeropuerto en busca de la fila de taxis negros. Le das al taxista el recibo del viaje y ya está. Muy fácil y sin complicaciones. Es un servicio muy útil para aquellos que no queráis perder el tiempo negociando un taxi o tenéis miedo de que os timen solo llegar. Porque, tranquilos, timar os timarán tarde o temprano.
¿Merece la pena visitar Nueva Delhi?
Lo sorprendente de Nueva Delhi es que es toda una ciudad de barrios residenciales. Todo está demasiado lejos y todo es demasiado igual. Quizás por eso y por la contaminación la capital de la India no es para nada una ciudad turística. Poca gente se queda más de un día pero nosotros nos quedamos dos noches en Delhi aprovechando que tenía un amigo viviendo allí, en Great Kalaish, el barrio residencial.
A pesar de que no me esperaba mucho de Delhi, tengo que admitir que la capital me sorprendió. Hay una gran cantidad de antiguos monumentos muy bien conservados, diferentes tipos de templos, grandes bazares y enormes parques. Igualmente, con dos días en Nueva Delhi tendrás suficiente.
Para moverse por la ciudad lo más cómodo es utilizar un tuc-tuc. Si sois unos cuantos, también sale a cuenta usar la aplicación Ola para pedir un taxi. Es ideal ya que tiene la opción de pagar en efectivo.
¿Qué ver en Nueva Delhi?
1. La Tumba de Humayun
Lo primero que visitamos fue la Tumba de Humayun. Es un complejo de edificios dedicados a Humayun, un antiguo emperador del Imperio Mogol y considerados por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad desde el año 1993. Para los extranjeros la entrada es de 500 rupias (6 euros) y para los indios 50 (60 céntimos).
Entre el complejo encontramos tumbas y mezquitas de arquitectura mogol, un antiguo imperio que existió entre los siglos XVI y XIX y que abarcó la mayor parte de territorios de la actual India, Pakistán y Bangladés.
La tumba de Humayun, que data del siglo XVI, es considerada como la pionera al estilo del Taj Mahal. Solo ver la tumba a lo lejos, con su simétrica e imponente estructura de color rojizo, sabes que ha merecido la pena venir hasta aquí.
2. El bazar Chandni Chowk
Chandni Chowk se encuentra en la parte antigua de Delhi. Mejor dicho, es el corazón de la vieja Delhi y sigue palpitando con fuerza. Es uno de los mercados más antiguos de la ciudad. Está situado justo en frente del Fuerte Rojo y se caracteriza por sus caóticas calles atiborradas de gente.
Solo llegar, se te echan prácticamente encima los conductores de los rickshaw (vehículos ligeros de dos ruedas empujados por una persona a pie o a pedales de una bicicleta). Te ofrecen un paseo por el mercado mientras hacen de guía. El precio por el paseo hay que negociarlo y la función de guía va incluida a cambio de una propina al final del trayecto.
Todos hablan perfecto inglés y balbucean un poco de castellano, francés, alemán, chino… Y cualquier idioma que les sirva para captar clientes. El precio de sus servicios es muy barato ya que cobran comisiones por llevarte a otras tiendas durante sus paseos.
Acordamos pagar 500 rupias (6euros) por un paseo de dos horas en rickshaw. Al cabo de 30 minutos y después de no haber avanzado más de 500 metros por las congestionadas calles de Chandni Chowk decidimos que es mejor bajar e ir caminando.
Callejeando por Chandni Chowk
Callejeando por sus saturadas calles, tus sentidos intentan acostumbrarse a tanto movimiento, tanto ruido y tantos olores mientras vas esquivando personas, coches, motos, bicis, vacas…
No te da tiempo a asimilar todo lo que está pasando a tu alrededor. Al final, solo te dejas llevar. Durante el recorrido nuestro simpático y espabilado guía nos advierte varias veces que tengamos cuidado con los carteristas.
Nos lleva a una tienda de té y especias donde nos muestras varias mezclas que existen en India. Espera que compremos algo para llevarse una pequeña comisión y por supuesto acabamos comprando un poco de té.
En este enmarañado mercado puedes encontrar de todo: especias, frutos secos, ropa, joyas, alfombras, tapices, adornos religiosos, delicias locales, etc. Y por si no te es suficiente, también puedes pararte a visitar distintos tipos de templos que hay, como por ejemplo: hindúes, budistas, un templo sikh, una iglesia cristiana, mezquitas…
3. El Mercado de las especias Khari Baoli
Continuamos nuestro camino hasta el mercado de las especias Khari Baoli, que se encuentra dentro del bazar Chandni Chowk. Solo entrar empezamos a toser, nos escuecen los ojos y tenemos que cubrirnos la cara a causa de la polvorienta atmósfera que rodea al lugar.
Nos cruzamos con sacos gigantes de todo tipo de especias, frutos secos, hierbas y té. Aunque es un mercado al por mayor donde comerciantes de todo Delhi vienen a comprar, si quieres, también puedes comprar cantidades pequeñas.
Subimos al tejado de uno de los edificios y observamos como la Vieja Delhi se oscurece poco a poco. A pocos metros observamos unos monos merodeando por los tejados buscando algo para meterse en la boca y aprovechamos para darles un par de plátanos que llevamos encima.
Con este primer contacto con la fauna salvaje de India damos por finalizada nuestra ruta por el alocado mercado de Chandni Chowk y nos volvemos a casa. En mi opinión, si vas a Delhi, y quieres ver la India más auténtica merece la pena visitar este caótico y laberíntico mercado. Eso sí, es posible que una vez visto no quieras volver nunca más.
4. Visita al Templo de Loto
Al día siguiente fuimos a visitar el Templo de Loto, el templo más moderno que he visto hasta ahora. Construido en el 1986, se caracteriza por su espectacular estructura blanca en forma de flor de loto y por ser un templo abierto a todas las religiones. Cualquiera puede ir a rezar o a meditar siempre y cuando sea respetuoso con las demás religiones. La entrada es gratuita.
5. Hauz Khas, el “barrio hipster” de Nueva Delhi
Por la tarde fuimos a un barrio que se llama Hauz Khas, el cual es conocido como la “zona bohemia de Delhi” o el “barrio hipster”. En este barrio hay un gigantesco parque con un lago y con bonitos jardines por donde pasear entre tumbas y antiguas construcciones en ruinas.
También hay una zona de bares y tiendas donde ir de compras o a tomar algo por la noche. Si buscas un relajado paseo durante el día o ambiente de noche, este es tu sitio.
Viaje de Nueva Delhi a Agra
Nuestro tercer día en la India nos fuimos de Nueva Delhi a Agra para ver el Taj Mahal. En mi siguiente artículo os relataré nuestra experiencia visitando el monumento funerario más famoso del mundo (con permiso de las Pirámides de Egipto).
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Vive como si fueras a morir mañana, aprende como si fueras a vivir para siempre.
– Mahatma Gandhi –
Quien es Humayun?
Fue un emperador del Imperio Mogol, quizás se me olvidó mencionarlo.