Trabajar y estudiar chino en Xiamen: mi experiencia

Cuando regresé a China, en septiembre del 2014 me fui a trabajar y estudiar chino en Xiamen. Para cambiar de aires después de 3 años en Kunming, para ver nuevos lugares de China, pero, sobre todo, para vivir cerca del mar. Dicen que los que nacen cerca del mar ya nunca se acostumbran a vivir lejos de él. En mi caso, no solo era un dicho, sino un hecho.

Xiamen (厦门), es una isla que se encuentra en la provincia de Fujian (福建). Está al sureste de China, no muy lejos de Taiwan. Toda la isla es una gran ciudad, moderna y desarrollada. Hay muchísimo turismo chino que viene a disfrutar del buen clima y de su aire sin polución y muchos extranjeros que vienen a hacer negocios.

Xiamen: Zona Especial Económica

La isla es conocida por tener, desde tiempos antiguos, uno de los puertos más importantes de importación y exportación de China. Tanto es así, que el nombre de la ciudad significa “Puerta de la Mansión”, haciendo referencia a su rol como “La Puerta de China”.

Xiamen está clasificada por el gobierno como “Zona Especial Económica”. Significa que tiene especiales políticas económicas y flexibles medidas gubernamentales que facilitan a las compañías extranjeras invertir y crear negocios.

Otras zonas de China con las mismas características son: Shenzhen, Zhuhai y Shantou (la provincia de Guangdong), la isla entera de Hainan, y Pudong (un distrito de Shanghai).

Trabajar y estudiar chino en Xiamen: día a día

Está característica especial hace que Xiamen sea un lugar repleto de extranjeros haciendo negocios de importación y exportación, todo lo contrario Kunming y a la provincia de Yunnan, donde la mayoría de extranjeros son almas errantes que pasan por ahí durante un viaje por el sureste asiático y deciden quedarse una temporada.

El acceso a la isla es muy sencillo ya que hay dos puentes que comunican la costa de China con la isla. Los puentes se pueden atravesar en autobús de línea, en coche o con el BRT (Bus Rapid Transit).

Tenía entendido que en China cada provincia es un mundo, y en Xiamen descubrí que ese dicho era totalmente cierto. La comida, el aspecto de la gente, la forma de ser, el ritmo de vida, el lenguaje; todo era diferente. Se podría decir que Xiamen estaba bastante más occidentalizado.

Estudiar chino en Xiamen: Universidad Huaqiao y Jimei

Solo llegar, me puse en contacto con escuelas y universidades para buscar el lugar más adecuado donde continuar mis estudios de chino mandarín. Enseguida me di cuenta de que, si no tienes una beca, estudiar en la isla te cuesta un ojo de la cara. Así que vivir en las afueras era una mejor opción.

Acabé apuntándome en el Instituto de Idiomas para estudiantes extranjeros de la Universidad de Huaqiao (华侨文学院), situado justo en la costa, en Jimei (集美). El campus universitario estaba en una zona muy tranquila y repleta de estudiantes de todos los rincones del mundo. Se podía ver Xiamen a lo lejos y con, el BRT, llegar al centro en 30 minutos.

Rápidamente me hice un buen grupo de amigos, todos compañeros de clase, latinos y tailandeses en su mayoría. Durante la semana, íbamos a clase y estudiábamos chino. Los fines de semana los aprovechábamos para dar vueltas por la isla, o como no, salir de fiesta. Era curioso volver a sentirse universitario.

Aprendí un montón de chino porque iba cada día a clase y pasé todos los exámenes, pero si que tengo que admitir que cansaba bastante ya que muchas asignaturas solo te enseñan a memorizar o a saber contestar la pregunta correctamente aunque no entiendas qué significa.

Trabajar en Xiamen: Academia de Inglés y Guarderias

En Xiamen, también hay muchas escuelas de inglés que buscan profesores extranjeros. Es una excelente opción si quieres combinar el estudio del chino mandarín con un trabajo de media jornada enseñando inglés.

Por supuesto, es ilegal trabajar con un visado de estudiante, aunque a menudo se hace la vista gorda, ya que suele haber más demanda que oferta. Los chinos están muy interesados en aprender inglés, especialmente en una ciudad donde los negocios con extranjeros son fundamentales para la economía, por lo que siempre se necesitan profesores de inglés.

Por eso, muchos combinan sus estudios de chino mandarín con trabajos a media jornada en academias de inglés, guarderías o incluso dando clases particulares para costearse la vida en Xiamen.

Si tienes dos años de experiencia enseñando inglés, eres nativo o tienes un título universitario de un país de habla inglesa, puedes intentar conseguir un visado de trabajo. En mi caso, después de unos cuantos años conseguía visado de trabajo y estuve trabajando de profesor de inglés en Kunming, en el enlace te cuento mi experiencia.

¿Qué ver y qué hacer en Xiamen?

1. Templo Nanputuo y su mirador

El templo de Nanputuo es un famoso templo budista de Xiamen fundado en la dinastía Tang. Su nombre significa: Putuo del Sur, porque está situado al sur de un lugar sagrado budista, el monte Putuo, en la provincia de Zhejiang.

El templo está rodeado de hermosas montañas con muchas cuevas profundas en las que se puede entrar. En la cima de la montaña hay un impresionante mirador desde donde se puede ver la Universidad de Xiamen y el río Lu.

2. Visita a la isla de Gulangyu

Justo antes de despedirme de la ciudad visité la isla de Gulangyu (鼓浪屿). Gulangyu es una pequeña isla muy turística que tiene 2 km² de superficie y que está enfrente de Xiamen. Se puede llegar fácilmente en ferry.

Si vas entre semana y no hay mucha gente puedes darte un tranquilo paseo por sus callejuelas visitando los edificios coloniales. Es aconsejable además subir a la Sunlight Rock dónde hay unas increíbles vistas de toda la isla de Xiamen. En cambio, si vas un festivo o el fin de semana, olvídate de disfrutar y prepárate para ver solo masas de chinos.

3. WuYishan y Tuluos

Estuve viviendo en Xiamen nueve meses hasta que mi visado de estudiante llegó a su fecha de caducidad. Fue la época en la que menos pude viajar porque casi no tenía tiempo.

Me quedé con ganas de visitar las montañas de WuYiShan (武夷山) y los Tulous (土楼), que son antiguos edificios circulares donde solían convivir unas 800 personas. Si tienes más tiempo que yo, sin lugar a dudas recomiendo ir a los dos sitios.

Siguiente Destino: De Xiamen a Hong Kong

En junio volví a España, a Tarragona, a casa. Desde que llegué por primera vez a China habían pasado casi cuatro años, de los cuales, en total, solo había estado tres meses en casa. Tocaba cambiar el arroz blanco de cada día por paella y bocadillos de jamón por una temporada.

Pero antes de eso, me fui a visitar Hong Kong; una ciudad que sorprende no solo por sus rascacielos, si no también, por ser una perfecta combinación entre occidente y oriente.

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Me enamoré de la vida, es la única que no me dejará sin antes yo hacerlo.

– Pablo Neruda –